13.8.16

El próximo lunes se iniciará el solemne triduo en honor a Santa Beatriz de Silva


Las Madres Concepcionistas Franciscanas de la Orden de la Inmaculada de María del Monasterio de Santa Ana de Montilla, y en concreto Sor Margarita, nos informan del solemne triduo en honor a su Madre Fundadora, Santa Beatriz de Silva, y que se celebrará del 15 al 17 de agosto en el mencionado templo, presidido por Ángel Lara Merino, párroco de San Francisco Solano.

De este modo, el próximo lunes 15 de agosto, solemnidad de la Asunción de la Virgen, se iniciará el mismo a partir de las 12.30 del mediodía, prosiguiendo el martes, día 16, con la celebración de la Santa Misa a las 8.30 de la mañana. Finalizarán dichos cultos el miércoles 17 con una solemne eucaristía en honor a Santa Beatriz de Silva con idéntico horario que el día anterior.


"Un año más, nos preparamos para honrar y celebrar a nuestra Madre, Santa Beatriz de Silva. Aquella mujer que inspirada por Dios, decidió abandonarlo todo para vivir para él, al estilo de María Inmaculada. Y como legado, nos dejó una forma de vida que damos continuidad en esta Santa Casa donde, desde el silencio, vivimos el misterio de Cristo desde la fe, la oración constante, la disponibilidad y el ocultamiento silencioso.

Son ya más de cinco siglos de una regla abrazada y profesada para el servicio, la contemplación y la celebración del misterio de María en su Concepción Inmaculada. Seducidas por el amor de Dios, nos hemos desposado con Cristo Jesús, nuestro Redentor y Señor mediante la profesión de los consejos evangelizadores de obediencia, sin propio, vividos en comunión fraterna y en perpetua clausura. Por tanto, nuestra forma de vida nos obliga a vivir las actitudes de María en el seguimiento de Cristo.

Desde el silencio de nuestra vida escondida, presentamos a nuestro Padre Dios las esperanzas y todas necesidades de nuestro pueblo y del mundo entero. Que Santa Beatriz nos bendiga a todos e interceda por cada uno de nosotros", concluye Sor Margarita, en nombre de las Madres Concepcionistas Franciscanas de la Orden de la Inmaculada de María del Monasterio de Santa Ana de Montilla.

La Iglesia Conventual de Santa Ana

El origen de la fundación de concepcionistas franciscanas a la que pertenece la Iglesia Conventual de Santa Ana de Montilla se remonta a 1580, aunque la comunidad no se constituyó hasta 1594 con monjas procedentes de Los Pedroches y unas beatas del hospicio de San Antón de Aguilar. Precisamente, el presbítero Andrés Martínez de Portichuelo, entonces capellán de este centro, fue el patrocinador del convento, donando para él casas y otros bienes en 1590 y 1598.

Su iglesia, bajo el auspicio del doctor Andrés de Espejo, empezó a construirse en 1630, año en el que se contrata la piedra de sillería con el santero egabrense Cristóbal del Castillo y los mármoles con el lucentino Juan Ruiz. En 1645 se cubría la Capilla Mayor, lo cual indica que las obras estaban terminadas o a punto de ello. El templo es de tres naves con cuatro tramos, produciéndose el contraste entre una amplia nave central y muy estrechas laterales, que más bien funcionan como pasillos marginales.


El retablo de Santa Beatriz de Silva

El retablo de Santa Beatriz de Silva de la Iglesia Conventual de Santa Ana de Montilla se encuentra, como el retablo de San José de dicho templo, en el crucero. Tiene mesa de similares características a la de este. Se encuentra realizado de madera tallada y dorada sobre fondos verdes. El banco muestra el sagrario entre pequeños estípites así como pequeñas urnas acristaladas utilizadas como relicarios.

El principal ostenta, entre los delicados estípites que señalan la calle central, una hornacina -rematada con medio punto sobre el que monta un doselete recto-, que cobija la imagen moderna de la fundadora de la Orden Concepcionista, Santa Beatriz de Silva, en sustitución de otra de la Divina Pastora, hoy en el convento.

Sendos estípites exteriores marcan las calles laterales en las que se abren huecos de cascarón, con remate semicircular, que albergan las imágenes de San Antonio, de época, y de San Francisco de Asís, una obra moderna. Encima de cada una de estas hornacinas se sitúa un espejo holandés hexagonal, enmarcado con follajes y elementos geométricos de talla, coronados por copetes sobre los que se alzan sendos cuadros con mixtilíneos marcos dorados, que penetran en el cuerpo superior.

La clásica cornisa como tránsito al ático está rota al penetrar ampliamente en el coronamiento elementos del cuerpo principal. Este remate se inscribe en líneas generales en un triángulo cuyo vértice superior lo ocupa la imagen de San Rafael. La decoración de este cuerpo, a base de elementos geométricos que se resuelven en volutas y tramos quebrados, se complementa con un lienzo, en el centro, con la figura de la Santa Faz, entre relicarios, y los dos cuadros que representan una dolorosa, tal vez sobre cobre, y un grabado antiguo.

Costeado por María Bernarda Castellano, en Lucena, es obra indudable de Francisco José Guerrero, quien debió realizarla en torno a 1755, momento en que salieron de sus gubias obras semejantes para la iglesia conventual lucentina de San Juan de Dios.


BENJAMÍN PORTERO DUQUE / PASIÓN POR MVNDA
FOTOGRAFÍAS: MONASTERIO DE SANTA ANA / BENJAMÍN PORTERO

2 comentarios :

Unknown dijo...

Hola como podría conseguir una imagen?

Unknown dijo...

Quisiera una imagen de esta Santa Virgen como podría conseguir una imagen. Gracias