Este año, nos marcamos nuevos objetivos que cumplir, como ha sido no solo disfrutar de todos los fines de semana de Cuaresma, comenzando el Miércoles de Ceniza, así como de la Semana Santa de Córdoba, sino también hacerlo de sus vísperas, acudiendo, entre otros destacados actos, al piadoso ejercicio del rezo del vía crucis, el Miércoles de Pasión, de Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder de la Hermandad Sacramental de la Quinta Angustia de la capital cordobesa, todo ello a costa de solicitar días de vacaciones en el trabajo y de nuestro bolsillo.
Así, en esta primera parte del reportaje que publicamos del solemne vía crucis de la Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos Mercedarios del Santísimo Cristo de la Merced, Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder, María Santísima de la Quinta Angustia y Nuestra Señora de la Merced en un exultante Miércoles de Pasión, podemos deleitarnos, entre otros maravillosos momentos, con la salida del Señor desde su Iglesia de Nuestra Señora de la Merced, viéndolo discurrir por lugares tan emblemáticos como la calle Cruz Conde y la mismísima Plaza de las Tendillas, siendo el monumento en honor al montillano Gonzalo Fernández de Córdoba, El Gran Capitán, testigo de excepción de su hermoso transcurrir hacia la Santa Iglesia Catedral.
En el primer templo de la Diócesis, continuamos caminando junto a Él, tanto en su entrada como en su salida del Patio de los Naranjos por la Puerta del Perdón y por la calle Cardenal Herrero. De esta manera, si en el solemne vía crucis hacia la Santa Iglesia Catedral, en la mágica tarde-noche del Miércoles de Pasión, Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder estuvo acompañado por un cuarteto de música de Capilla de la Banda de La Estrella de Córdoba, en el regreso a su templo lo hizo a los sones de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús de la Redención de la capital cordobesa.
REPORTAJES: BENJAMÍN PORTERO DUQUE
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