Tal y como han comunicado este mismo mediodía a Pasión por Mvnda, la Verbena Popular a beneficio de la Iglesia de San Agustín que en un principio se iba a celebrar mañana sábado, día 27 de septiembre, a partir de las 21.00 de la noche, en la plaza del Obispo Pérez Muñoz -conocida popularmente como el Llanete de San Agustín-, finalmente tendrá lugar, debido a la previsión de inclemencias meteorológicas a lo largo del acto, a las 20.00 de la tarde en la planta alta del mercado de abastos.
Iglesia de San Agustín / Fotografía: Benjamín Portero Duque - Archivo Pasión por Mvnda
En ella, en la que se dispondrá de servicio de barra, se contará con las actuaciones del Baile de Salón de José Carlos Caracuel y Candelaria Aguilar; con el Coro La Tradición; con la actuación flamenca de Josele y Agustín Ortega; con el cante flamenco a cargo de Paquillo Cobos y Paco 'El Maño', estando a la guitarra Curro Cruz; y con la actuación del grupo Acrópolis.
Dicho acto se encuentra organizado por el Consejo Parroquial de la Iglesia de San Agustín junto con las Hermandades que realizan Estación de Penitencia desde este Templo montillano, como son la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores, con sede canónica en la misma, y la Pontificia Hermandad del Santo Entierro, Soledad y Angustias de la Madre de Dios, con sede canónica en la Parroquia de San Francisco Solano.
El pasado 30 de marzo, tras más de un siglo sin abandonar la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores la Iglesia de la calle Ancha, las Imágenes que conforman la Cofradía -Nuestro Padre Jesús Nazareno, el Santísimo Cristo de la Yedra, María Santísima de los Dolores y el Santísimo Cristo del Perdón, a excepción de Nuestro Padre Jesús Rescatao, que recibe culto anualmente en la Parroquia de San Francisco Solano-, regresaban a la Iglesia de San Agustín, tras haber permanecido dos años fuera de su sede canónica, como consecuencia de las obras de rehabilitación que se llevaron a cabo en este Templo montillano y que el Obispado dio por concluidas días antes de este histórico y Solemne Traslado. Por su parte, Nuestro Padre Jesús Rescatao regresaba a San Agustín, igualmente en Solemne Vía Crucis de Traslado, el viernes 4 de abril, desde la Parroquia de El Santo, con motivo de la celebración de la Estación de Penitencia de la Cofradía en la mañana del Viernes Santo.
Estas obras, en las que el Obispado de Córdoba aportó unos 90.000 euros para la reparación de la techumbre, que corría peligro de desprendimiento, y las bóvedas de la parte del presbiterio, y en las que la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores está haciendo frente a unos gastos que ascienden a 180.000 euros, financiados a quince años, por la restauración llevada a cabo en la Capilla de su Titular de la Iglesia de San Agustín y en sus dependencias anexas, se encuentran pendientes de los arreglos estéticos interiores del Templo, muy deteriorado por la humedad, y parte de la cubierta central, además de la bóveda del brazo izquierdo, donde se hallan las Imágenes del Santo Entierro, Nuestra Señora de las Angustias y la Virgen de las Mercedes, para las cuales se ha organizado esta verbena popular con el objetivo de recaudar fondos para financiar estas obras.
Desde hacía varias décadas, el principal Templo de la Semana Santa montillana –el único que se conserva en Andalucía del cenobio fundado por la orden agustiniana en el primer cuarto del siglo XVI- se encontraba en muy mal estado, hasta el punto que la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores tuvo que acometer en varias ocasiones importantes obras de impermeabilización de las cubiertas exteriores para evitar desprendimientos.
De hecho, en julio de 2006, el preocupante estado en que se encontraba la Iglesia obligó a clausurar, "por riesgo de hundimiento", uno de los espacios principales del Templo: la suntuosa Capilla de Jesús Nazareno. La estancia, que se encuentra en el lateral izquierdo, en el lado del Evangelio, fue erigida bajo el patronazgo de los Fernández de Córdoba entre 1677 y 1689, y, al igual que toda la Iglesia de San Agustín y el claustro del Hospital de San Juan de Dios –anexo al Templo-, está declarada Bien de Interés Cultural (BIC).
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