25.6.14

Una distinción extendida: éstas son las 24 coronaciones canónicas que la Diócesis de Córdoba tiene reconocidas


La ceremonia de la Coronación Canónica tuvo primero rango de excepcional y más tarde fue más accesible.

Hubo un tiempo en que la Coronación Canónica de una Imagen de la Virgen era un acontecimiento excepcional que apenas se vivía una vez cada década en una Diócesis. Eran los tiempos en que esta distinción, que nace a finales del siglo XIX, la tenía que conceder el Papa, y por lo tanto tenía que acreditarse una devoción continuada y muy arraigada. Fruto de ello fue la primera Coronación Canónica que se dio en la Diócesis: la de Nuestra Señora de Araceli, Patrona de Lucena, en mayo de 1948. Su presencia en la Catedral de Córdoba tendría carácter de excepcional.

Hubo que esperar casi dos décadas para la siguiente Coronación Canónica, también histórica: la de Nuestra Señora de los Dolores en la capital, el 9 de mayo de 1965. A partir de entonces, las Coronaciones llegaron por la vía de la autorización del Obispo y fueron más frecuentes. Fruto de este primer impulso son la Virgen del Castillo de Carcabuey (1982) y la Cabeza de Rute (1986). Se abre entonces un periodo en el que casi no falta un bienio sin Coronaciones Canónicas en la Diócesis de Córdoba.



Petalada a la Virgen de los Remedios de Aguilar este año / Foto: ABC Córdoba

Impulso

Así, en 1987 se distinguió a la Purísima Concepción de Puente Genil y a las Angustias de la capital. En 1988 a la Virgen de Villaviciosa del pueblo del mismo nombre y en 1990 a la Salud de Castro del Río. Llegaría en 1993 la de Nuestra Señora del Rosario, de la cordobesa Hermandad de la Expiración, la primera Coronada en el interior de la Catedral. En 1994 hubo cuatro: la Virgen de los Ángeles de Hornachuelos, la Fuensanta de Córdoba -cuyos primeros intentos databan de las décadas centrales del siglo XX-, las Veredas de Torrecampo y la Soledad de Priego.

La llegada del Obispo Javier Martínez hizo que el proceso fuese otra vez menos sencillo. De los últimos años de Infantes Florido datan las de la Virgen de la Estrella de Villa del Río (1995) y los Remedios de Aguilar, en 1996.

En 2000 se Coronó a la Virgen de la Piedad de Iznájar y en 2003 volvió a verse una Coronación en la capital: la de la Virgen del Socorro en la plaza de la Corredera. En 2015 se cumplirán diez años de la distinción de otra de las grandes devociones de la provincia: la Virgen de la Sierra, patrona de Cabra y con gran devoción en toda Andalucía, donde tiene varias filiales. Fue una de las Coronaciones que sí tuvo rango de excepcional en su momento.

Las siguientes se sucedieron en los años de Juan José Asenjo: la Virgen de Gracia de Benamejí (2007), María Auxiliadora de Córdoba (2009) y en 2010 las patronas de Cañete de las Torres y Palma del Río: las Vírgenes del Campo y de Belén, respectivamente.

Las dos últimas citas fueron en la Catedral de Córdoba: la Purísima Concepción de Linares en mayo de 2011 y Nuestra Señora del Carmen, ambas de la capital, un año después. El actual Obispo, Demetrio Fernández, todavía no ha dispuesto ninguna Coronación Canónica, aunque sí ha presidido las ceremonias.

No hay comentarios :