Si no se le trata personalmente, será muy difícil descubrir la personalidad de Andrés Ramírez Hidalgo, historiador montillano y activo propagador de las esencias de este pueblo cordobés con vocación universal. Una ciudad que conoce como pocos, ya que en ella coinciden sus dos amores: las tradiciones locales y el campo, por un lado, y la actividad docente como profesor de Historia. Un contenido amplio y un reto permanente para mejorar la imagen de Montilla, abierta de par en par a los visitantes que confiesan sentirse admirados.
Y hasta entusiastas, si se degustan algunos de los vinos generosos que se elaboran en las bodegas y cooperativas, donde cada montillano se convierte en un entendido defensor de su historia y de sus personajes más eminentes.
A pesar de sus conocimientos y de su asombrosa memoria, Ramírez huye del mundillo de la cultura institucional.
Un personaje tan inteligente, que sabe nadar y guardar la ropa, no está comprometido con nadie, aunque sabe de todo y de todos, y a decir verdad, sus preferencias se mueven con mayor fijeza en el entorno de la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos, las tradiciones locales, la Semana Santa, y cualquier capítulo de nuestra historia.
La Parroquia Mayor de Santiago y el Castillo de los Fernández de Córdoba ocupan la parte más alta del cerro donde tuvo su origen Montilla / Andrés Ramírez Hidalgo: julio 1999
La disponibilidad de Andrés Ramírez es algo impagable. Cuando se consigue superar su negativa inicial, el único escollo, y no insalvable, que encuentre quien se proponga unirlo a su causa y defenderla contra viento y marea, descubrirá su eficacia y lealtad en el trabajo, sobre todo en equipo. De esta manera, su producción, toda ella en revistas locales y algunas publicaciones de mayor ámbito, incorpora nuevos datos del término y de otros conceptos desconocidos para el lector de a pie.
Además cuenta con grandes amigos con los que comparte cuanto sabe y las experiencias que ha llevado a cabo durante muchos años en Montilla. Entre ellos, Miguel Aguilar, Bosco Portero, José Antonio Cerezo y otros amigos bien conocidos y valorados en Montilla.
José María Luque / Maestro
Diario Córdoba, 10 de noviembre de 2014
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