Tal y como se informa en la página web paseillo.es, y como ya adelantó el pasado 14 de septiembre Pasión por Mvnda, a las 12.00 del mediodía del pasado domingo, día 4 de octubre, en la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán de Lucena, se congregaban la junta de gobierno de la Venerable Cofradía de María Santísima de la Aurora junto con la Agrupación de Cofradías, hermandades y cofradías de Pasión y Gloria de dicha localidad, autoridades locales, fieles y devotos para celebrar la Solemne Eucaristía de Acción de Gracias por el 300 aniversario de la bendición de la Ermita de María Santísima de la Aurora y la apertura del nuevo curso cofrade que celebraba la Agrupación de Cofradías lucentina.
Fotografía: paseillo.es / Antonio Berguillos
La Misa fue concelebrada y presidida por el reverendo Nicolás Rivero Moreno, consiliario de la Cofradía de La Aurora y párroco de Santo Domingo de Guzmán. Solemnizaron con sus cánticos la Coral Lucentina, que interpretó la Misa Ángelis.
El solemne acto comenzaba con la entrada de las reliquias de San Juan de Ávila a hombros de algunos miembros de la junta de gobierno de la Cofradía de La Aurora y las palabras del presidente de la Agrupación de Cofradías, Francisco Requerey Ramírez, que se dirigió a los asistentes para dar inicio al nuevo curso cofrade. Para finalizar, Antonio Muñoz Navarro, hermano mayor de la Cofradía de María Santísima de la Aurora, habló a los presentes recordando como sucedía la bendición de la ermita de su titular hace 300 años y resaltó la importancia de este aniversario.
Al término de la Santa Misa tuvo lugar la Procesión Eucarística, acompañada de las reliquias de San Juan de Ávila y los estandartes de las cofradías y hermandades lucentinas, que entonando cánticos a Nuestro Señor, realizaron el siguiente itinerario: Cabrillana, Llanete Virgen de la Estrella, Llorente el Ciego, Juan Blázquez, Juan Muñoz de Castilla y Abad Serrano, hasta la Ermita de Nuestra Señora de la Aurora. Durante el recorrido fueron numerosos los altares que los vecinos dispusieron, donde la Procesión Eucarística se detuvo para realizar una oración.
Acto seguido, la comitiva recibía al Santísimo en la Ermita de María Santísima de la Aurora, donde daba comienzo la Vigilia de Adoración al Santísimo Sacramento, que se prolongó, de forma ininterrumpida, hasta las 21.00 de la noche y concluyó con el rezo del Santo Rosario, oración de acción de gracias, bendición y reserva del S.D.M., canto de la Salve a María Santísima de la Aurora y el ofrecimiento de besar para todos los fieles las reliquias de San Juan de Ávila.
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