Del 29 de septiembre al 3 de octubre, a partir de las 20.00 de la tarde, las hermanas clarisas del Monasterio de Santa Clara de Montilla celebran, en la iglesia del mismo nombre, el quinario en honor a su Seráfico Padre, San Francisco de Asís, junto con las hermanas terciarias franciscanas del Rebaño de María del colegio San Luis de nuestra ciudad.
El último día del quinario, el viernes, 3 de octubre, a partir de las 22.30 de la noche, se celebrará una gran vigilia y tránsito de Nuestro Padre, San Francisco de Asís.
El día 4, solemnidad del Seráfico Padre, tendrá lugar, a partir de las 20.00 de la tarde, una gran celebración y la veneración de su reliquia. La celebración estará presidida por el reverendo padre Manuel Caler.
Las intenciones de los cultos serán por la paz. Porque, como decía San Francisco de Asís, "donde hay guerra, pongo yo amor".
El retablo de San Francisco de Asís
El retablo de San Francisco de Asís de la Iglesia del Convento de Santa Clara de Montilla es de madera tallada y dorada. Consta de un banco que incluye el sagrario con la tabla pintada al óleo con un Niño Jesús dormido como puerta; principal con hornacina que contiene la imagen del titular; y ático que incluye un lienzo de pintura que representa la Piedad, de aproximadamente 100x80 centímetros en óvalo, bajo corona y dosel que entreabren unos aéreos angelillos.
Dos estípites sustentan una quebrada cornisa con dentículos sobre la que se alzan machoncillos con floreros. Se completa el retablo con unos grandes aletones de densa hojarasca que en el espacio correspondiente al cuerpo principal muestran a cada lado una ménsula con doselete para cobijar un San Juanito y un Santo Domingo, ambos de talla. Estos aletones, en la parte superior se articulan triangulando el ático para superar la gran corona imperial y organizar sobre ella, a modo de dosel, un volado sobre el conjunto. Es obra fechable hacia 1750.
La imagen de San Francisco de Asís
La imagen de San Francisco de Asís de este templo montillano es una talla de 160 centímetros, incluido el pedestal. El santo contempla con arrobo un crucifijo, que sujeta con la derecha, y mantiene, en la izquierda, un cilicio de plata. A pesar del estatismo de su actitud, la figura ondula desde la cabeza, ligeramente inclinada, hasta la pierna derecha, adelantada, a través de los pliegues de la túnica. Es obra contemporánea del retablo.
En el retablo mayor de la Iglesia de Santa Clara también se encuentra una imagen de San Francisco de Asís. De talla policromada, representa el aspecto habitual del santo de Asís, en contemplación absorta de un crucifijo, que sostiene en su mano izquierda. Ostenta los estigmas en manos y pies y viste un hábito decorado con doradas flores.
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