27.2.19

Hoy se cumplen 25 años de la bendición del Santísimo Cristo de la Juventud de Montilla


Con motivo del XXV aniversario de la bendición del Santísimo Cristo de la Juventud de Montilla que se conmemora hoy, día 27 de febrero, recordamos la portada de la revista 'Nuestro Ambiente', editada por la Asociación de Antiguos Alumnos Don Bosco de nuestra ciudad, correspondiente al mes de marzo del año 1994 y obra de Manuel González Candelas (q.e.p.d), además de la crónica recogida en ella acerca de este acontecimiento. No obstante, en el espacio oficial de la hermandad en Facebook puedes encontrar otros muchos recuerdos.

Llegó nuestro Cristo de la Juventud

¡Por fin! Ese día tan esperado para muchos de nosotros ya llegó, aunque aún parece que sigue lejano. La llegada de la nueva imagen del Cristo de la Juventud ha sido uno de los acontecimientos más esperados de la vida de esta joven hermandad.


Muchos sudores por parte de algunos e incluso incredulidad por parte de aquellos que no vieron tan cerca "el nacimiento" de la nueva imagen, pero todo eso queda atrás al comprender que todo vale la pena con sólo mirarle a los ojos.

Con tantas ganas y entusiasmo, el acto de la bendición del Santísimo Cristo de la Juventud fue todo un éxito. Se realizó el domingo 27 de febrero. Estuvo presidida por don Eusebio Muñoz Ruiz, Inspector de los Salesianos. El coro de la hermandad puso en ella todo lo mejor que tenía de sus cantos.

Como asistencias a destacar contamos con la del imaginero Miguel Ángel González Jurado que ha realizado la nueva imagen del Santísimo Cristo de la Juventud. Representantes de diversas cofradías de Montilla y de fuera -destacamos la de Utrera y Córdoba- y, cómo no, la gran cantidad de hermanos que quisieron estar con "su Cristo" en un día tan importante.

Y como no podía faltar en un ambiente como el nuestro, después de tanta solemnidad, tuvimos una convivencia con una comida de hermandad. En ella no faltó la fiesta ni la alegría, quedando así en un rato muy agradable para todos, y que no estaría mal repetirlo de vez en cuando, ya que resultó una experiencia muy positiva y un gran acercamiento de todos los hermanos.

Y para terminar el día, aquellos que lo quisieron, subimos a dedicarle un ratito a nuestro "otro Cristo" que, a pesar de lo que piense mucha gente, no se va a quedar olvidado y mucho menos a borrarse de nuestros corazones.

Por suerte, esto sólo es un gran paso que espero que sirva para que cada día vayamos levantando, con el esfuerzo de todos, esta joven hermandad a la que no le faltan ganas de superarse. Eso sí, siempre con la ayuda y guía de nuestro Cristo y cómo no de María Auxiliadora.

SARA ARCE / VOCAL DE RELACIONES

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