8.5.20

Octavo día de novena en honor a San Juan de Ávila, Hijo Adoptivo de Montilla


Pensamientos del Maestro Ávila

Día octavo

Oración inicial

San Juan de Ávila. Sermón 49. Infraoctava del Corpus

«Señor mío, ¡cuántos milagros hiciste en este mundo,
cuántos muertos resucitaste, cuántos cojos sanaste,
a cuántos ciegos diste lumbre,
a cuántos sordos diste oídos!
Ves aquí un muerto
que no tiene más que la lengua de vivo.
Aplica en mí lo que padeciste,
ayuda a mi flaqueza, alumbra mis ojos,
haz que oigan mis oídos tus palabras de vida,
despierta mi alma de tan profundo sueño,
haz que mi corazón oiga tus palabras,
de tu dulzura da gusto a mi paladar
y haz que pierda el sabor que toma de mis pecados».


Carta 4. A un predicador

Más imprime una palabra después de haber estado en oración que diez sin ella

«No tiene Dios negocio que más le importe que el de las almas. Y por ellas lo crió todo, y Él mismo se hizo hombre, para en la carne que tomó, poder comunicarse con los hombres. No miremos a otra parte sino a la gloria de Dios, y ésta busquemos, y de ésta seamos pregoneros. Enviados somos que quieran a Cristo. Miremos no nos busquemos a nosotros, que sería extrema traición. Fidelísimo fue Cristo a su Padre, cuya gloria siempre predicó y buscó.

Nunca pierda su oración y recogimiento. Y en esto mire muy mucho, porque he visto algunos que han dado cuanto tenían, y quedáronse pobres para sí y para otros. Más imprime una palabra después de haber estado en oración que diez sin ella. No en mucho hablar, mas en devotamente orar y bien obrar está el aprovechamiento. Y por eso así hemos de mantener a los otros, nunca nos apartemos de nuestro pesebre y nunca falte el fuego de Dios en nuestro altar».







Noticias relacionadas


FOTO: BENJAMÍN PORTERO DUQUE
VÍDEOS: DIÓCESIS DE CÓRDOBA

No hay comentarios :