15.4.22

Santo Entierro de Jesús desde la Iglesia de San Agustín

VIERNES SANTO, DÍA 15 DE ABRIL

PONTIFICIA HERMANDAD DEL SANTO ENTIERRO, SOLEDAD Y ANGUSTIAS DE LA MADRE DE DIOS

FUNDACIÓN: 30 de mayo de 1588, siendo aprobada por el Obispo Francisco Pacheco.

TEMPLO: Parroquia de San Francisco Solano, aunque realiza su estación de penitencia desde la Iglesia de San Agustín.

HERMANA MAYOR: Laura Navarro Navarro.


NÚMERO DE NAZARENOS: No tiene. El acompañamiento es llevado a cabo por fieles. De este modo, la estación de penitencia cuenta con unos 300 penitentes, aproximadamente.

HÁBITO: Túnica negra con cíngulo dorado para todos los portadores de San Juan Evangelista y hermanos que portan enseres e insignias, menos los del paso del Cristo Yacente y María Santísima de la Soledad, que visten traje oscuro.

INSIGNIAS: Cruz y faroles de guía, bandera, estandarte de Nuestra Señora de la Soledad, incensarios y bordones.

APUNTES HISTÓRICOS: La Pontificia Hermandad del Santo Entierro, Soledad y Angustias de la Madre de Dios, es el resultado de la unión, en 1660, de las ya existentes cofradías. Por un lado, la Cofradía del Santo Entierro, de cuyo año de fundación no se tiene constancia, y la Cofradía de la Soledad y Angustias de la Madre de Dios, fundada en 1588.

La primera imagen del Cristo Yacente era una talla articulada, con la que, en la tarde del Viernes Santo, se realizaba el Descendimiento de la Cruz, hasta colocarlo en el lugar donde procesionaba más tarde. No fue hasta 1670 cuando se realizó, con los donativos de los hermanos, el sepulcro que actualmente procesiona. La actual imagen del Cristo Yacente se cree que es del año 1696.

La Pontificia Hermandad del Santo Entierro, Soledad y Angustias de la Madre de Dios, está compuesta de cuatro tallas. Por un lado, la imagen de San Juan Evangelista es una obra barroca de autor anónimo, perteneciente a la escuela granadina, del siglo XVII.

Por su parte, la talla de Nuestra Señora de las Angustias con su Hijo Jesucristo que sostiene en sus brazos, que actualmente no procesiona, es una talla en madera, de autor anónimo, de finales del siglo XVI. El conjunto escultórico tiene claras reminiscencias barrocas por la expresividad de las imágenes, el plegado de los paños y el planteamiento con que el imaginero aborda la composición de su obra.

De igual manera, la imagen de Cristo Yacente en el Sepulcro es una talla anónima de origen barroco, realizada en la segunda mitad del siglo XVII, aunque puede ser atribuida a Juan de Mesa ‘El Mozo’. Procesiona en una urna, en madera de caoba y cristal con apliques de plata. En su interior y exterior se aprecian también los angelitos de la misma época, portando símbolos de la Pasión.

Asimismo, Nuestra Señora de la Soledad es una imagen barroca de la escuela granadina, y de autor anónimo, realizada en 1677, encargada por su entonces hermano mayor, Pedro Franco de Toro. Porta entre sus manos una corona de espinas y luce un corazón atravesado por siete puñales, realizado en plata, donado por el corregidor Juan de Liébana a finales del siglo XVII, así como una diadema con doce estrellas, labrada en plata con punzón del orfebre cordobés Martín del año 1800, donada por José María Trespalacios, marqués de Altamira. El manto con el que procesiona la imagen mariana fue realizo en la primera mitad del siglo XX.

ITINERARIO: Salida desde la Iglesia de San Agustín, a las 20.30 de la tarde, prosiguiendo por las calles Plaza del Obispo Pérez Muñoz, Ancha, San Francisco Solano, Enfermería, San Sebastián, Llanete de la Cruz, Juan Colín, Plaza de Munda, Ancha y Plaza del Obispo Pérez Muñoz, con entrada en la Iglesia de San Agustín a las 23.30 de la noche, aproximadamente.

ACOMPAÑAMIENTO: Escolta del Cuerpo de Lanceros de la Centuria Romana Munda, en el paso de Cristo Yacente en el Sepulcro; tambores de viruta, tras el mismo; y un trío de música de capilla de la localidad de Priego de Córdoba, en el paso de Nuestra Señora de la Soledad.

VENERACIÓN A SUS SAGRADOS TITULARES: El pasado Domingo de Ramos, día 10 de abril, las sagradas imágenes del Cristo Yacente en el Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad estuvieron expuestas a veneración, de la que os ofrecemos el siguiente reportaje fotográfico.













BENJAMÍN PORTERO DUQUE / PASIÓN POR MVNDA

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