La Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado celebra su 75º aniversario con una procesión extraordinaria

Eran las 19.14 de la tarde de ayer, 22 de octubre, cuando Rafael Vázquez, antiguo hermano mayor de la Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado y Nuestra Señora de la Paz, llamaba a las puertas de la Parroquia de Santiago Apóstol para que se abrieran las mismas, haciéndolo a las 19.16 minutos, iniciándose así la salida procesional extraordinaria de esta corporación del Domingo de Resurrección montillano, tras la Santa Misa celebrada a las 18.00.

Abría el cortejo su hermosa cruz de guía, obra del artista montillano José Luis Jiménez, acompañada por sus dos faroles de guía, seguida del bacalao de la hermandad, y por hermanos y hermanas con farol en mano, así como del simpecado de Nuestra Señora de la Paz, la bandera del Santísimo Cristo Resucitado y mujeres ataviadas con la tradicional mantilla española.

A tan señalada cita no faltó una representación de los responsables de las hermandades y asociaciones religiosas montillanas tanto de Pasión y de Gloria y de la Agrupación de Cofradías, así como los hermanos mayores, o sus descendientes, que ha habido a lo largo de estos 75 años de historia de la Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado y Nuestra Señora de la Paz, y miembros de la Corporación Municipal.

Antecediendo al trono del Señor, de unas dimensiones más reducidas que el que procesiona cada Domingo de Resurrección, debido a la falta de portadores, la cruz parroquial y el cuerpo de ciriales, anunciaba la llegada de la imagen del Santísimo Cristo Resucitado, que lucía, en lugar de sus características potencias, su particular nimbo, con el que procesionaba hasta el estreno de sus potencias doradas, rematadas en pedrería, ejecutadas en el año 2000, por el platero sevillano Manuel de los Ríos.

Cerraba el cortejo la Agrupación Musical La Unión de Montilla, poniendo sus sones a la sagrada imagen del Santísimo Cristo Resucitado. Realizada en 1946, refleja una media sonrisa, además de paz y tranquilidad en su rostro, teniendo una altura de casi dos metros.

Recientemente, la imagen ha sido restaurada por el artista montillano Miguel Ángel Sánchez Jiménez, cuya solemne eucaristía de acción de gracias se celebró el pasado 13 de marzo en la Parroquia de Santiago Apóstol, tras ser retirado del culto el 16 de agosto de 2021. Fundada en 1947 por un grupo de feligreses de la Parroquia de Santiago Apóstol, el primer hermano mayor de la Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado fue Rafael Raigón Aguilar, quien encargó la imagen a los talleres Bellido de Valencia.

En su itinerario extraordinario por las calles de Montilla, el cortejo discurrió por las calles Iglesia, Gran Capitán, San Juan de Dios, San Luis, Escuelas, Fernández y Canivell, Plazuela de La Inmaculada, Corredera, Plaza de La Rosa, Arcipreste Fernández Casado e Iglesia, para finalmente regresar a su sede canónica con la entrada de su cruz de guía, en este templo montillano, a las 21.23 de la noche, haciéndolo, a las 21.30, la sagrada imagen del Señor.

Sin embargo, finalmente no hubo las anunciadas reflexiones acerca de la Resurrección de Jesucristo, en lugares tan destacados como la Casa de San Juan de Ávila, el Monasterio de Santa Ana y la Basílica Pontificia -en los cuales se realizó una ofrenda floral, destacando la realizada ante el lienzo de Nuestra Señora de la Paz, que perteneció al Maestro de Santos, en la Basílica de San Juan de Ávila-, aunque sí las Madres Concepcionistas Franciscanas de la Orden de la Inmaculada de María del citado convento le cantaron emotivamente al Santísimo Cristo Resucitado, que abandonaba el cortejo en la Plazuela de La Inmaculada, para encontrarse, frente a frente, con el Santísimo Cristo del Calvario, incorporándose, posteriormente, a la comitiva, en el citado enclave montillano, de regreso ya a su sede canónica.

BENJAMÍN PORTERO DUQUE / PASIÓN POR MVNDA