El pasado miércoles, día 1 de agosto, se presentó, en uno de los patios de la Casa-Museo del Inca Garcilaso de Montilla, la 44ª Cata Flamenca, que tendrá como cabeza de cartel al cantaor 'El Pele', que acudió al acto de presentación.
Junto con el cantaor cordobés estuvo el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, quien destacó la idiosincrasia de este festival flamenco “que está vinculado a nuestro patrimonio enológico, el vino, y que tenemos, tanto el Ayuntamiento como la Peña El Lucero, la responsabilidad de mantenerlo y hacerlo singular dentro del mundo flamenco, algo complicado cuando hay tanta diversidad y oferta, pero tenemos esa obligación de buscarle su sitio dentro de los festivales que se celebran en Andalucía”.
Por su parte, la teniente de alcalde del área Sociocultural, Mujer y Participación Ciudadana, Conchi Espejo, destacó el esfuerzo realizado por el Ayuntamiento para poder ofrecer “un cartel de auténtico lujo, al que invitamos a todos los aficionados para que se acerquen a Montilla y disfruten de este evento” en las Bodegas Navisa, donde este año vuelve a celebrarse la Cata, que la ha acogido en otras ocasiones.
El encargado de presentar el cartel fue el presidente de la Peña Flamenca El Lucero, Salvador Córdoba, que reiteró la importancia de los artistas que este año participarán en la 44ª Cata Flamenca. “Creo que hemos conseguido estar a la altura del flamenco nacional porque Montilla se lo merecía. Llevamos muchos meses trabajando para poder ofrecer esta mezcla de artistas con una trayectoria reconocida internacionalmente como son El Pele, Antonio Mejías o Luisa Muñoz, junto con la fuerza de la juventud representada por Samuel Serrano o La Tremendita”.
En la presentación de la 44ª Cata Flamenca estuvieron los artistas que se subirán al escenario el próximo 25 de agosto. Entre ellos destacó la intervención de El Pele, que recordó que ya estuvo en la primera edición de la Cata Flamenca “con la suerte de que entonces me tocó Paco de Lucía. Los años pasan, pero el flamenco perdura, por eso vengo con la misma ilusión de aquel niño que participaba en la primera Cata de Montilla para aportar mi granito de arena para dar a la Cata y a Montilla el nivel que se merecen.
El cartel de la 44ª Cata Flamenca, como ya informó Pasión por Mvnda, está compuesto por Manuel Moreno Maya 'El Pele', Rosario 'La Tremendita', Antonio Mejías, Antonia Contreras, Samuel Serrano y Luisa Muñoz, al cante; y Paco Cepero, David Caro, Juan Ramón Caro, Salvador Gutiérrez, Francis Pinto y Paco León, al toque. Por su parte, el baile lo pondrá Ana María García 'Anamarga' y la presentación de la Cata correrá a cargo de Antonio Varo.
En esta edición, la Cata se celebrará en Bodegas Navisa, comenzando a las 22.00 de la noche del próximo sábado 25 de agosto, dentro de la LXIII Fiesta de la Vendimia Montilla-Moriles. El cartel anunciador de la Cata es obra del artista gráfico montillano Juan Carlos Espejo.
La venta anticipada de localidades se puede realizar on-line en la página kieroentradas.com, en la oficina de Turismo de Montilla, situada junto al Alhorí del Castillo de nuestra ciudad, de lunes a viernes, de 9.00 a 14.00, y el sábado, domingo y festivos, de 10.30 a 13.30, así como el viernes y el sábado, de 18.00 a 20.00, y en el Centro Cultural Alcalde Antonio Carpio, de lunes a viernes, de 9.00 a 14.00, además del día del festival en la taquilla, al precio de 20 euros.
La 44º Cata Flamenca de Montilla está organizada por el Ayuntamiento de Montilla y cuenta con la colaboración de la Diputación de Córdoba, la Peña Flamenca El Lucero, Bodegas Cobos y la Denominación de Origen Protegida Montilla-Moriles.
La Cata Flamenca de Montilla regresa a una bodega
Las dos últimas ediciones, aunque no la primera vez en hacerlo, las antiguas naves municipales de la avenida de Las Camachas acogieron la Cata Flamenca de Montilla, incluida en el programa de actos de la Fiesta de la Vendimia Montilla-Moriles.
A pesar de ser un éxito en 2016 y 2017, como en años anteriores, al término de la pasada edición, en Pasión por Mvnda nos preguntábamos si el mencionado emplazamiento de la avenida de Las Camachas, era el idóneo para tan destacado y prestigioso espectáculo artístico, logrado, a lo largo de su historia, por la Peña Flamenca El Lucero, y no hacerlo en el lugar adecuado, que sería, desde el punto de vista de quien suscribe, en una bodega, como ha ocurrido en la gran mayoría de ocasiones que ha tenido lugar este evento y como ocurrirá en este año 2018.
Y es que en la 42ª edición de este acto, celebrado en el año 2016, el Ayuntamiento de Montilla decidió trasladar la Cata Flamenca de Montilla hasta las antiguas naves municipales de la avenida de Las Camachas, tras celebrarse en 2015 en el marco incomparable de las históricas Bodegas Alvear, las más antiguas de toda Andalucía.
De este modo, la Cata Flamenca de Montilla volverá, en su 44ª edición, a ser fiel a sus orígenes y tradición, como ocurrió por última vez en 2015, y regresará a una bodega montillana, como son las Bodegas Navisa, situadas en la avenida José Padillo, sin número, para no volver a caer así en el error, que se ha cometido, según el punto de vista de un servidor, al celebrar este sinigual espectáculo flamenco en las antiguas naves municipales de la avenida de Las Camachas.
Los orígenes de la Cata Flamenca de Montilla
Tal y como recordábamos el pasado año, según aparece en el libro 'Montilla. Entre la Historia y la Memoria', de Julián Ramírez Pino, la principal actividad de la Peña Cultural Flamenca 'El Lucero' era, en palabras de Manuel Ruiz Hidalgo, resucitar el cante en reuniones, promoviendo así la aparición de nuevos valores. En su deseo de acercar el mundo del flamenco al gran público, ideó la Cata Flamenca, un festival que auna el vino y el flamenco y cuyo título fue creado por Pepe Cobos.
La primera Cata tuvo lugar en 1970 en Bodegas Montulia. A lo largo de los años pasaron, entre otros, Antonio Ruiz Soler, Antonio Mairena, Paco de Lucía, Fosforito, Manolo Sanlúcar, Matilde Coral, Camarón, Mario Maya, Melchor, Meneses, Paco Cepero, Enrique el Cojo, Terremoto, Morao, Manuela Carrasco, Lebrijano, Enrique de Melchor, Curro Vélez, Enrique Morente, Joselero, Rafael Romero, Juan Varea, Fernanda y Bernarda de Utrera, Chano, Chocolate, José Mercé, Habichuela, Serranito, Curro Mairena, La Perrata, Manolo Mairena, Turronero, Curro Malena, Curro de Utrera, Juanito Villar, Oscar, La Paquera de Jerez, Carmen Linares, Tina Pavón, Naranjito de Triana, Calixto, Clavel, Manolo Ávila, María Oliveros, Concha Calero, Merengue, Manuel de Palma, Tomatito, Pepa Montes, Boquerón, Las Vargas, Los Fernández, Pansequito...
La Cata, según Jaime Luque, se creó para la divulgación y el engrandecimiento del arte flamenco. Quedó siempre vinculada al mundo del vino, y por tanto, obligada a contar con las distintas bodegas montillanas para su celebración. Jaime recuerda aún aquellas largas reuniones en Casa Palop entre bodegueros y organizadores para elegir la bodega en que habría de tener lugar la Cata del año. Eran tiempos en los que el negocio de los vecinos tenía una perspectiva de futuro. Para Agustín Gómez, la Cata era ante todo un espectáculo en donde se intentaba armonizar el arte de beber y de escuchar, es decir, de catar*.
Aunque nació para popular, la Cata se convirtió poco a poco en masiva, lo que llegó a convertirse en un problema, teniendo que acomodar a muchos aficionados que, además de recibir a la entrada una media botella de vino y un catavinos de recuerdo, había que instalarlos delante de una mesa donde, aparte de las viandas, en ocasiones se vieron hasta infiernillos para calentarlas. Pese a todo, llegó a convertirse en modelo de otros festivales flamencos de importancia.
* Agustín Gómez: 'La voz flamenca'. Obra Cultural de la Caja Provincial de Ahorros, 1988. Página 128.
BENJAMÍN PORTERO DUQUE / PASIÓN POR MVNDA
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